El pasado fin de semana se celebró en Portimao la décima prueba del Campeonato del Mundo de Superbike. Hasta allí viajaron 16 pilotos españoles para participar en las diferentes clases: SBK, SSP, SSP300 y Stock1000. Entre ellos estaban los habituales en la máxima categoría como Xavi Forés, que no terminó la carrera 1 e hizo décimo en la segunda, Román Ramos, cuarto y no clasificado, y Jordi Torres, séptimo y décimo tercero. Pero hubo otros que debutaron en este certamen y lo hicieron con muy buena nota.
Borja Quero y Miquel Pons llegaron a Portugal con muchas ganas. Ellos, junto a Héctor Barberá y Nacho Calero, serían los españoles en la parrilla de salida de SuperSport. Aunque durante todo el fin de semana trabajaron mucho y muy bien, finalmente, Quero y Calero no pudieron terminar la carrera mientras que Barberá vio la bandera a cuadros décimo y Pons duodécimo.
En Stock1000 Lucas de Ulacia fue el debutante cruzando la meta en décimo quinta posición.
9 españoles en SuperSport300, cinco de ellos entre los 10 mejores
En SuperSport300 es donde más representación española hubo. Ana Carrasco centró, durante todo el fin de semana, las miradas de los aficionados porque podía llevarse el título mundial, pero Ferrán Hernández, recientemente proclamado campeón de España de SSP300, Alex Borner o Guillém Erill estaban ante una gran oportunidad de demostrar su calidad.
En el caso de Ferrán, llegaba con la ilusión del niño que es, con el título del nacional bajo el brazo después de haber hecho una temporada magnífica. Su equipo, el Kawasaki PL Racing Junior Team, no encontró mejor regalo para el piloto que llevarlo directamente, de la mano también de la RFME, al Mundial de SSP300 y Ferrán, demostrando su calidad, dio el 100% en pista. En los libres ya se encontró muy bien tanto con la moto como con el circuito y en la Superpole1 terminó cuarto. Aunque no entró en la Superpole2, salió desde la quinta fila de parrilla en carrera lo que le podía permitir estar en cabeza cuando el semáforo se apagara. Luchó con todo y fue octavo finalizando por delante de otros rivales más experimentados en esta competición como la propia Ana o Borja Sánchez.
Precisamente Sánchez, Manu González, Mika Pérez, Dani Valle y María Herrera cerraron el círculo de los nuestros en esta categoría corriendo diferente suerte. En una carrera en grupo con adelantamientos constantes y pelea por el pódium hasta la bandera ajedrezada, Mika terminó segundo y Manu tercero. Dani fue séptimo, Ana décima, Alex undécimo, Guillem duodécimo y Borja décimo sexto. La peor parada fue María, que rodó durante toda la manga en el grupo delantero, pero un fallo mecánico la privó de obtener un gran resultado en la última vuelta.
A nadie le sorprende el buen estado de salud del Campeonato de España Cetelem de Velocidad y es que se ha convertido ya en una auténtica fábrica de pilotos. Miquel Pons, Borja Quero, Mika Pérez, Manu González, Ferrán Hernández, Alex Borner, Guillem Erill, María Herrera y Lucas de Ulacia participan también en este certamen. El nivel es tan alto que cuando compiten en carreras internacionales sus resultados son así de buenos.