Recientemente la Real Federación Motociclista Española sancionó a un piloto por infringir el reglamento de Disciplina Deportiva de la RFME al hacer unas declaraciones públicas en la red social Facebook, en las que ponía en tela de juicio la labor de un delegado deportivo y del jurado de su disciplina, haciendo acusaciones que atentaban directamente contra los mismos.
Según el mencionado reglamento, aprobado por la Asamblea General y por el propio CSD, son considerados como infracciones graves “los actos notorios y públicos, que atenten a la dignidad y el decoro deportivos”. Como es lógico y necesario la RFME se vio obligada a aplicarlo como medida sancionadora.
La sanción que debe aplicarse en estos casos es la suspensión por tres pruebas para el piloto, pero el Comité de Competición apreció el atenuante de no reincidencia y la redujo a una única prueba. El expedientado, ejerciendo sus derechos, recurrió al Tribunal de Administración del Deporte (TAD), el cual ha desestimado el recurso del piloto y, por tanto, ratifica la decisión de la RFME.
Desde la Real Federación Motociclista Española defendemos la práctica de un deporte limpio dentro y fuera de la pista y, por tanto, todo aquello que atente contra este principio será susceptible de sanción.